EL VESTIDO Y EL COMPORTAMIENTO
Miqueas 6, 8: “Y humillarte para andar con D’s” (modestia)
Al cambiarnos la ropa debemos hacerlo sin exponer nuestro cuerpo.
El sentido de pudor indica humildad delante de el Eterno.
Levítico 20, 23 “Y no andéis en prácticas de la gente que Yo echaré delante de vosotros”
Levítico 18,3 “Ni seguiréis sus leyes”
Deuteronomio 12, 30 “Guárdate de caer en sus trampas”
No debemos copiar las costumbres de los idólatras. Incluye la vestimenta, el peinado.
Sanedrín 74a: "Está establecido que un judío no se debe parecer a un idólatra ni aún respecto a los cordones de sus zapatos".
No usar ropa ostentosa. La ropa de un israelita debe ser tal que denote humildad modestia. Deuteronomio 12, 30 “Tú no dirás: porque ellos andan vestidos de púrpura, yo también andaré vestido en púrpura; porque ellos andan con un atuendo determinado, yo también andaré lo mismo. Porque esas son las maneras de los orgullosos y arrogantes, pero no la de la simiente de Yaacov. Su modo de vida debe ser modesto y humilde y no mirar a los altaneros”
Así como nos diferenciamos de los paganos por nuestros conocimientos y opiniones, nos debemos diferenciar en nuestra forma de vestir. Levítico 20, 26 “Y os he apartado de los pueblos, para que seáis míos”
Evitar ropa costosa porque impulsa el falso orgullo, pero tampoco debemos usar ropas demasiado modestas o desaliñadas a fin de evitar el desprecio de la gente. Nuestra ropa debe ser de precios moderados y pulcras.
Debido a que se ha dado importancia a la mano derecha en distintos mandamientos, cuando nos vestimos debemos dar preferencia a la mano y pie derechos. Pero si se debe atar un nudo se hace primero el del lado izquierdo debido a que los tefilín se usan sobre el brazo izquierdo.
No se debe poner dos prendas a la vez, porque es contraproducente para la memoria.
El varón debe andar siempre con la cabeza cubierta.
Está prohibido caminar arrogantemente erecto con el cuello estirado. Isaías 3, 16 “y andan cuellierguidas”. Pero tampoco se debe caminar muy agachado. Por la forma de caminar se puede deducir si es sabio e inteligente o tonto y necio.
El hombre debe cuidar de no pasar entre dos mujeres, dos perros o dos cerdos o viceversa.
